Personajes: Chandrak

 Buenos días, orcos y orcas (Sí, son feos de narices, pero también son bienvenidos al blog 😜).

Hoy os voy a presentar a este peculiar cachorro de orco llamado Chandrak.  Para ser exactos, se trata de un semiorco (mezcla de orco y humano) y quizás
debido a esta mezcla, nuestro amiguito no es tan feo como sus parientes de pura cepa.   De hecho, cuando los elfos lo encontraron durante su huida de Feldgrin, Chandrak era un niño mestizo de no más de cinco años, y aunque al principio lo miraban con suspicacia y muchas reticencias (hay que comprender que los orcos habían cometido una auténtica matanza en la ciudad de Feldgrin), poco a poco el semiorco se va ganando el corazón de los elfos (al menos de algunos) y seguro que también de los lectores.

Aunque hay quien no se fía de este pequeño "cachorro del enemigo", Chandrak tiene un arma secreta para desarmar a sus detractores.  Pone unos "ojitos" irresistibles, capaces de enternecer a un troll de los pantanos. Para que os hagáis una idea, no encuentro imagen más representativa que la mirada de este famoso gato, ese que calzaba unas "bonitas botas".

Como dato curioso, comentaros que inicialmente Chandrak fue imaginado de un color pardo tostado, quizás en un intento de darle un aspecto más salvaje, más cercano a la imagen de una fiera.  Pero qué diantres, el dibujo con el que mi hija Cris lo representó en su portada del libro me pareció tan acertado, y tenía unos ojos tan expresivos, tal y como yo los imaginaba, que finalmente decidí modificar el pasaje del libro en el que describía la imagen de nuestro semiorco, y le hice un trabajito completo de "chapa y pintura".  Sí, el verde está muy visto en todo tipo de historias, desde los sempiternos marcianitos hasta Shreck, pero aún así creo que a Chandrak le sienta de maravilla.  Y además, en este libro es aún pequeño, pero quién sabe si en mi próxima obra Chandrak ha crecido y adquiere un aspecto tan impresionante como el del maromo a la derecha de este párrafo. ¿A que no estaría nada mal?

Con esta última imagen me despido, y a la vez aprovecho para destrozar yo mismo la broma sobre los orcos con la que abría este post.  En mi vida he aprendido que la belleza exterior es algo irrelevante que solo sirve para confundirnos mientras somos jóvenes.  Aunque parezca un tópico típico, la belleza verdadera está en el interior. Solo hacen falta ojos especiales para saber verla.

Hasta pronto, mis fieles feldgrineses. Pronto os traeré más personajes que seguro que os fascinarán. Besos...